El agente, fuera de servicio, persiguió y retuvo al joven, que había huido tras apropiarse de una cartera y tirar al suelo a un hombre en Ventanielles
Salía de un establecimiento de Ventanielles cuando se encontró con la siguiente escena: un hombre mayor tirado en la carretera que gritaba 'al ladrón, al ladrón' y un joven que huía corriendo mientras varias personas del barrio lo perseguían sin conseguir darle alcance. Le ocurrió el lunes al mediodía a un guardia civil de la Unidad de Seguridad Ciudadana (Usecic) de Oviedo, ese día de vacaciones, que no dudó en emprender la persecución hasta detenerlo.
Según informó ayer la Benemérita, tras retener al individuo, con numerosos antecedentes, y mientras llegaban los refuerzos, el funcionario tuvo que hacer frente a la «violencia extrema» del detenido. También mediar «con los ciudadanos que se fueron acercando al lugar y parecían con intención de linchar al delincuente». El suceso comenzó cuando este joven hurtó una cartera en el interior de una cafetería del barrio. Al salir corriendo empujó al hombre mayor y lo dejó tirado en la carretera, detalló la Guardia Civil en la nota de prensa.
A partir de ahí entró en acción el agente fuera de servicio. Emprendió la persecución del agresor y lo retuvo en los jardines de uno de los edificios del barrio. Allí le inmovilizó en el suelo «debido a la resistencia que ponía», describe el escrito. El guardia civil llamó por teléfono a la sala del 062, la Central Operativa de Servicios de la Comandancia de Oviedo, quien a su vez solicitó el apoyo de la Policía Nacional, que se presentó en el lugar de los hechos. Durante este tiempo, fue cuando el guardia civil tuvo que hacer frente a una doble función: evitar la agresión por parte del delincuente y que ese grupo de residentes de la zona pudiera lincharlo. Al llegar la Policía Nacional, según concluye la nota de prensa, los efectivos comprobaron que le constaban numerosos antecedentes policiales.
De libranza Hace apenas quince días, otro funcionario fuera de servicio, en este caso un policía nacional, resultó decisivo para interceptar a dos menores en el supermercado del centro comercial Los Prados. Se habían apoderado de varios objetos de valor, corrían zafándose del personal de seguridad y no se percataron de que lo hacían en dirección a un policía. Este logró retenerlos, hasta que los citados vigilantes de seguridad llegaron en su apoyo. Minutos después una dotación policial se hizo cargo de la identificación y detención de los jóvenes. Los trasladaron a comisaría para practicar las oportunas diligencias como autores del presunto hurto.
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