El delegado del Gobierno en Andalucía, Antonio Sanz, ha destacado lunes la “creciente contribución del sector de la seguridad privada” en la comunidad para “garantizar la libertad de los ciudadanos y proteger sus derechos” y ha ensalzado su “estrecha colaboración” con las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, en el marco de la Ley de Seguridad Privada aprobada hace dos años.
Durante su intervención en la clausura del Día de la Seguridad Privada en la provincia de Sevilla, en el que se han otorgado menciones a 95 vigilantes, guardas rurales, responsables y técnicos de empresas de seguridad que han destacado por su labor en pro de la protección de personas y bienes y por su colaboración permanente con las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, Sanz ha destacado que la Ley de Seguridad Privada ha ayudado a “afianzar un sector fundamental en el entramado de la seguridad de las sociedades europeas más avanzadas”.
El delegado ha felicitado y ha animado a continuar en la misma línea de trabajo a los galardonados, a los que ha calificado como “los mejores aliados de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, integrados, bajo su tutela, en el modelo de seguridad colectivo”. Durante su intervención, Sanz ha recordado que en mayo se cumplieron dos años de la entrada en vigor de esa ley, impulsada por el Gobierno “para combatir el intrusismo con medidas rigurosas y mejorar la coordinación entre las empresas de seguridad privada y el sector público” y que, en su opinión, ha contribuido a “afianzar” en España y en Andalucía “un sector fundamental en el entramado de la seguridad de las sociedades europeas más avanzadas”.
CASI 30.000 VIGILANTES Según sus palabras, la seguridad privada emplea en la actualidad en las ocho provincias andaluzas a casi 30.000 vigilantes, de los que 5.000 trabajan en la provincia de Sevilla, y cuenta con más de 500 empresas vinculadas con esta actividad, de las que un diez por ciento se ubica en dicha provincia. Sanz ha precisado que sólo en Sevilla funcionan actualmente más de medio centenar de centros de formación, “en los que se preparan nuevos vigilantes de seguridad, lo que refleja la pujanza de un sector en expansión y con futuro, que contribuye a la creación de riqueza y a la generación de empleo”.
En su intervención, el delegado ha afirmado que la seguridad es “uno de los principios básicos sobre el que edificar una sociedad libre y democrática” y ha expresado su convencimiento de que los ciudadanos “perciben y valoran” el esfuerzo conjunto que se está realizando, que se ha traducido en una mejora sostenida de los índices de criminalidad en Andalucía. Así, según los datos que ha facilitado, la tasa de criminalidad se situó en Andalucía, en el primer trimestre de este año en 39,6 delitos por cada mil habitantes, la más baja desde que se empezó a publicar este registro y 7,1 puntos por debajo de la que había en 2012, mientras que las infracciones penales disminuyeron un 5,6 por ciento respecto al primer trimestre del año pasado.
Por lo que respecta a la provincia de Sevilla, Sanz ha recordado que la tasa de criminalidad ha bajado en este trimestre 1,4 puntos y es igualmente la más baja que se conoce, mientras que el total de infracciones penales ha disminuido un 11,6 por ciento en la provincia, según los datos del Ministerio del Interior. “Podéis estar orgullosos de haber contribuido a configurar un modelo de seguridad ejemplar dentro y fuera de nuestras fronteras”, ha afirmado Sanz a este respecto, señalando la importancia que tiene la seguridad como “un valor que atrae inversión y turismo”, generando “empleo y crecimiento”.
Finalmente, el delegado del Gobierno ha expresado su apoyo al sector de la seguridad privada para “ayudar en todo lo que contribuya a construir una Andalucía más segura y, por tanto, más libre y más próspera”, lo que a su juicio constituye “una aspiración que comparte la gran mayoría de los ciudadanos”. Al acto, celebrado en la sede de la Fundación Cajasol, han asistido la subdelegada del Gobierno en Sevilla, Felisa Panadero, el jefe superior de Policía Nacional de Andalucía Occidental, Francisco Perea y el coronel jefe de la Comandancia de la Guardia Civil de Sevilla, Francisco Mora, así como representantes del sector de la seguridad privada y agentes de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado en la provincia.