El Sindicato Profesional de Vigilantes – S.P.V., mayoritario en el sector de la seguridad privada en la provincia de Cádiz, hace un llamamiento a la “cordura y responsabilidad de empresas y trabajadores, a la vez que un llamado a la solidaridad con los más débiles: autonomos y pymes”.No podemos caer en la contradicción de aplaudir todas las tardes a las 20:00 horas el esfuerzo de sanitarios que entregan su esfuerzo en la jornada y en sus horas de descanso por cuidar de los enfermos y por otro lado aprovechar la bonanza del sistema para beneficiarnos en lo personal.
Estamos asistiendo con preocupación y estupor a la ola de cientos de E.R.T.Es (expedientes de regulación de empleo temporales) de empresas que se han apuntado a solicitar bajo el procedimiento rápido creado por el gobierno, a causa del cierre o reducción parcial de actividad, sea o no por causa de fuerza mayor, empresas muchas de ellas, en su gran mayoría, que cerraron los ejercicios de años anteriores con altos porcentajes de beneficios y millones repartidos en dividendos entre su accionariado, y que si nadie controla, como de momento todo apunta, puede repetirse la paradoja, que ya ocurrió en este país con la banca, que tuvo que ser rescatada con dinero de todos, pero cuando volvieron a repartir beneficios olvidaron reingresar a las arcas públicas las cantidades recibidas a fondo perdido, que además nadie les requirió, pues no fue un préstamo, fue un regalo de todos nosotros, endeudando más a los ciudadanos que somos los grandes perdedores de todas las crisis económicas y que como siempre, lo que más tienen salen por falta de control en las medidas de ayudas más beneficiados, dejando en el camino siempre a los grandes perjudicados: trabajadores autónomos, trabajadores por cuenta ajenas que pierden su empleo y cientos de pymes cada día más endeudadas.
Un sistema de ayudas necesarias es básico para estabilizar el mercado, pero no es buena medida si se realiza sin control alguno, ya que desde S.P.V. estamos convencidos que bancos y grandes empresas, con importante musculo financiero, están descargado sobre el estado la presión de salarios y cotizaciones de sus trabajadores, y a final de año, muchas de ellas, presentarán sus cuentas anuales con grandes beneficios y volverán a repartir dividendos a costa de una ciudadanía cada día más empobrecida.
Hoy los empresarios no quieren asumen riesgos y a la mínima dificultad busca el refugio del estado, y para nada afrontan sus compromisos sociales, eso mismo está sucediendo en la clase trabajadora, que opta por irse a casa en muchos casos y se incluyen voluntarios en ERTEs, aunque suponga una pérdida del 30% del salario mientras dura el mismo, al menos en los 180 primeros días, en lugar de buscar fórmulas alternativas y paliativas, que si bien suponen un claro sacrificio personal o retroceso de derechos laborales: anticipar vacaciones, recuperar jornadas perdidas tras la vuelta a la normalidad, etc., que por supuesto para nadie es agradable, pero que demuestra un alto índice de compromiso social, no hipotecando el futuro de todo un país por no alterar tu actual sistema de bienestar, donde el egoísmo nos lleva a ser conservadores, por falta de empatía con el que pierde todo en el camino, ante la falta de control de la autoridad y por los abusos de los de siempre, que se apunta a la oferta como si de una rebaja se tratase.
ACUERDO EN LA EMPRESA LOOMIS En la empresa Loomis, en una negociación basada en la responsabilidad social hemos alcanzado en el día de hoy un acuerdo para salirnos mientras nos sea posible del ERTE nacional que se está negociando en Madrid y que dejará temporalmente a muchos trabajadores en el apeadero del estado. En nuestra provincia, pese a haber bajado la facturación al día de hoy en casi un 50 %, hemos decidido y acordado con la empresa, sacrificar nuestras vacaciones anticipando estas al disfrute de los periodos previamente pactados, aunque ello suponga cambiar playa por encierro en casa, así como dejar en suspenso nuestro calendario laboral y jornada garantizada, para recuperar cuando proceda dentro de este año 2020 el tiempo adeudado ahora por falta de trabajo durante el estado de alarma. Todo ello supone un claro retroceso para los trabajadores, pero a cambio de esto, la empresa Loomis Spain se compromete a no mandar a nadie al ERTE y mantener los puestos de trabajo existentes. (Si para retornar nuestros derechos tuviésemos que movilizarnos que no quepa duda que lo haremos, pues no es un regalo a la patronal, sino un gesto con la sociedad. Creemos que debe cundir el ejemplo y que este sirva para remover conciencias para que no hipotequemos el futuro de todos más allá de lo estrictamente necesario.
Firmado.: Antonio Montesinos Ruiz, Secretario del Sindicato Profesional de Vigilantes – S.P.V.
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