Desde el SINDICATO PROFESIONAL DE VIGILANTES - SEVILLA denunciamos la irresponsable desprotección en la que la mayoría de las empresas del sector de la Seguridad Privada mantienen a sus trabajadores frente a la amenaza de contagio por el virus causante de la enfermedad denominada COVID-19.
Sevilla, 19 de marzo de 2020 La injustificable dejación de muchas de las empresas del sector privado de la seguridad a la hora de proveer a su personal operativo de los imprescindibles equipos de protección individual supone, cuando menos, una imprudente temeridad. La obligación de garantizar la salud de los Vigilantes de Seguridad mientras permanecen es sus puestos de trabajo es ineludible e inexcusable.
Sevilla, 19 de marzo de 2020 La injustificable dejación de muchas de las empresas del sector privado de la seguridad a la hora de proveer a su personal operativo de los imprescindibles equipos de protección individual supone, cuando menos, una imprudente temeridad. La obligación de garantizar la salud de los Vigilantes de Seguridad mientras permanecen es sus puestos de trabajo es ineludible e inexcusable.
El SINDICATO PROFESIONAL DE VIGILANTES – SEVILLA considera fundamental la implicación de las Administraciones Públicas para que conminen a las diferentes empresas a que protejan adecuadamente a sus empleados y les faciliten todos los medios y el equipamiento necesarios para salvaguardarlos de la posibilidad de ser contagiados —o de que puedan llegar a contagiar a otras personas— por el coronavirus mientras trabajan.
No es admisible que en los lugares de máximo riesgo por alta concentración y afluencia de personas (hospitales, aeropuertos, metro, estaciones de tren, supermercados, etcétera), los trabajadores dedicados a la custodia y la seguridad de las personas e instalaciones no dispongan de los medios básicos de protección: guantes, mascarillas y gafas.
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