La Ley 5/2014, de 4 de abril, de Seguridad Privada establece que al frente de un departamento de seguridad debe de existir un director de Seguridad debidamente habilitado que sería el máximo responsable en esta materia dentro de la organización. Entonces, ¿qué condiciones son necesarias para conseguir la habilitación como director de Seguridad? El Ministerio de Interior establece los siguientes requisitos generales:
-Ser mayor de edad.
-Tener nacionalidad española, de algún otro Estado de la Unión Europea o de un Estado con
el que España tenga suscrito un convenio internacional que permita el acceso a esta profesión.
-Poseer la capacidad física y la aptitud psicológica necesarias para el ejercicio de las respectivas funciones.
-Tener una titulación universitaria relacionada con la seguridad o bien un título de director de seguridad obtenido a través de alguno de los cursos reconocidos oficialmente por el Ministerio del Interior.
-Carecer de antecedentes penales por delitos dolosos.
-No haber sido sancionado en los dos o cuatro años anteriores por infracción grave o muy grave en materia de seguridad privada.
-No haber sido separado del servicio en las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad o en las Fuerzas Armadas españolas o del país de su nacionalidad o procedencia en los dos años anteriores.
-No haber sido condenado por intromisión ilegítima en el ámbito de protección del derecho al honor, a la intimidad personal y familiar o a la propia imagen en los cinco años anteriores a la solicitud.
Funciones y ámbitos de actuación del director de Seguridad La polivalencia de un director de Seguridad es evidente. En nuestro alrededor siempre encontramos a personal capacitado velando por la seguridad en ámbitos como la industria del transporte, la sanidad, las telecomunicaciones o incluso en el deportivo, como es el caso de los clubes de fútbol. Esto se debe a que los profesionales de la seguridad están preparados para afrontar adversidades de distinta índole en diferentes disciplinas. Algunas de las más destacados son:
–Seguridad física: se basa en el conjunto de mecanismos y acciones que detectan y previenen los riesgos, con el fin de proteger algún recurso o bien material. Está orientada a la seguridad en edificaciones como oficinas.
– Seguridad electrónica: está relacionada con la capacidad de determinar sistemas avanzados de seguridad como, por ejemplo: controles de acceso, televisores de circuito cerrado (CCTV), cámaras de videovigilancia o alarmas.
– Seguridad de personas: son las funciones relacionadas con la protección de las personas en lugares y eventos, tanto privados como públicos. Además, abarca los controles de identidad personal y detección de delitos. Una de las principales acciones es comunicarse con Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado en caso de alarma.
– Seguridad lógica: se refiere a la seguridad en el uso de software y los sistemas, la protección de los datos, procesos y programas, así como la del acceso de los usuarios a la información. En la actualidad la Ciberseguridad es el área con más crecimiento del sector.
– Seguridad contra incendios: son las actuaciones realizadas por el departamento de Seguridad para aplicar y controlar el Programa de Seguridad ante este tipo de emergencias. Unas de las principales funciones son la organización humana con la finalidad de reducir al máximo las posibles consecuencias económicas y así como humanas.
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