ALMERÍA: Cazan a dos miembros de la «banda del Seat León» tras embestir a un coche de Policía

Los arrestados, ambos españoles y residentes en Madrid, pertenecen a un grupo criminal itinerante que utiliza coches robados para alunizar en los establecimientos antes de huir en otro vehículo con todo el botín.

Agentes de la Policía Nacional en Almería detuvieron a principios de mes a dos de los miembros de un grupo criminal organizado especialistas en robos con fuerza mediante el modus operandi del alunizaje y que cuentan en su haber con multitud de delitos a lo largo del territorio nacional. El grupo es conocido entre los investigadores policiales de todo el país como «la banda del Seat León» dado que escoge este tipo de coches -que sustrae previamente- para ejecutar sus 'golpes' por todo el país. Los hechos tuvieron lugar la madrugada del día 3 de diciembre. Los presuntos miembros de la banda, que poseen su residencia habitual en Madrid capital -en los barrios de Villaverde y Usera- se apropiaron de un vehículo de alta gama, un Audie A6, en la localidad de Pinto, coche con el cual se desplazaron hasta Linares (Jaén) en donde intentaron sin éxito acceder al interior de un centro comercial del que huyeron al ser sorprendidos por los vigilantes de seguridad.

Fue entonces cuando recalaron en Níjar, en Almería, en donde se apropiaron de un Seat León tras forzar la puerta del coche y, con ambos vehículos, se dirigieron a un centro comercial de Almería, Carrefour, en donde empotraron varias veces el robado en Níjar contra una de las puertas de emergencia hasta conseguir franquearla y acceder al interior. «Allí, y con objetos contundentes como picos, mazas y destornilladores, reventaron los cierres de dos tiendas de telefonía móvil, y se apoderaron de diferentes terminales telefónicos de alta gama, y material de telefonía e internet», narraban hoy fuentes policiales.

Sorprendidos por la Policía Nacional durante la huída Los vigilantes de seguridad del centro comercial, que habían advertido la operación, dieron el aviso a los agentes de la Policía Nacional que lanzó un dispositivo con tres vehículos de patrulla en el que se cerraron las posibles vías de escape. Fue justamente en el instante en que los asaltantes emprendieron la huída con el botín cuando fueron sorprendidos por varios de los agentes del operativo.

Los miembros de la banda embistieron contra uno de esos vehículos policiales dejando su coche y el policial abandonados. Y entonces, a pie, los agentes lograron la detención de dos de los cuatro aluniceros, quienes han ingresado en prisión por orden judicial, acusados de los delitos de pertenencia a organización criminal, robo de uso de vehículo, robo con fuerza en las cosas y atentado a agente de la autoridad. Uno de ellos fue alcanzado en el entorno del hipermercado, el segundo lo fue cerca de las vías del tren, en la calle Minerales, oculto bajo unos arbustos. Los arrestados, españoles, vecinos de Madrid, de 23 y 18 años de edad, responden a las iniciales J.C.M.R. y S.B.G. La investigación continúa abierta, y no se descartan nuevas detenciones relacionadas con estos hechos delictivos. En el vehículo en el que se dieron a la fuga, fueron recuperados por la Policía Nacional 36 teléfonos móviles de última generación (alguno de los cuáles eran pedidos pendientes de entregar a clientes de algunos de los comercios ubicados en el espacio comercial), tres routers, dos destornilladores de grandes dimensiones y un pico.

Modus operandi de la banda Según han relatado desde la Policía, los integrantes de esta banda arrestados son especialistas en la sustracción de un determinado tipo de vehículos, para utilizarlos como ariete, y lanzarlos contra las puertas de acceso o escaparates de establecimientos comerciales. Una vez consiguen acceder al interior, dejan abandonado dicho vehículo, dado que en la mayoría de los casos presenta daños que impiden su uso. «Su actuación es especialmente violenta, haciendo uso de objetos de gran contundencia para la perpetración de los robos», narran. Una vez cometido el delito, se dan a la fuga en un segundo vehículo de alta cilindrada, con inobservancia de las normas de circulación e incluso embistiendo a los agentes de la Policía Nacional si es preciso para eludir la acción de la justicia.

FUENTE: www.ideal.es AQUÍ