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28 de abril de 2019

MURCIA: Denuncian la contratación de vigilantes para regular el tráfico en Semana Santa en Beniel

Policías locales critican durante el Pleno «la usurpación de funciones» y la alcaldesa responde que «solo informaban»

Agentes de la Policía Local de Beniel denunciaron en el último Pleno que el Consistorio recurrió a vigilantes privados durante la procesión de Miércoles Santo para realizar funciones de regulación del tráfico, lo que consideran una «usurpación de funciones».

Desde Comisiones Obreras (CC OO) explican que esta situación viene precedida por la falta de efectivos que arrastra la plantilla, y que tendría su origen en varias causas. El sindicato pone el punto de mira en «la concesión de comisiones de servicios de agentes a otros municipios, la jubilación amortizada de uno de los policías y una plaza también amortizada por la pérdida de condición de funcionario». Añade que con la actual plantilla se incumple la ratio de habitantes por municipio, según el convenio suscrito por la Comunidad Autónoma con el Plan de Seguridad Ciudadana.

El sindicato lamenta que, a pesar de las negociaciones iniciadas en la Mesa General, que se transformaron en un principio de acuerdo para cubrir el déficit de personal de formal temporal, «posteriormente esas propuestas fueron rechazadas por el concejal de Policía», que en un primer momento dio su conformidad, según CC OO. La situación derivó, considera el sindicato, en tener que contratar los servicios de una empresa de seguridad privada «para sustituir la falta de efectivos policiales, ejerciendo funciones como la regulación del tráfico, una competencia que por ley es exclusiva al Cuerpo».
«Detrás de las vallas»

La alcaldesa, Mari Carmen Morales, manifestó ayer a 'La Verdad' que «se contrató a dos trabajadores de seguridad privada ante la falta de efectivos policiales dispuestos a atender los servicios extraordinarios, como el Miércoles Santo, pero nunca hicieron una labor de gestión del tráfico». La regidora afirma que estos vigilantes «solo se encargaron de informar a los conductores, limitándose a estar detrás de las vallas que cortaban las calles para evitar el acceso de vehículos al recorrido de las procesiones, según avala el informe del cabo de servicio de la Policía Local».

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