El Juzgado de lo Social número 1 de Gijón ha declarado nulo el despido de una trabajadora y obliga a la cadena de alimentación para la que trabajaba a que se le readmita.
En ella solicitaba que se declarase nulo su despido, que se condenase a la empresa a su readmisión y al abono de una indemnización de treinta mil euros.
La trabajadora, que comenzó a tener conflictos con la entidad tras solicitar una reducción de su jornada con el objetivo de conciliar, interpuso una demanda contra la empresa y contra el Fondo de Garantía Salarial. En el fallo judicial se explica, además, que antes de que esta mujer fuera despedida había solicitado la baja temporal por incapacidad, un problema derivado de una enfermedad común que le afectaba a la muñeca izquierda -tenosinovitis de Quervain-. Esta circunstancia fue otro de los motivos de las desavenencias entre ambas partes, detalla la sentencia.
La mujer, defendida por Francisco Calvo, aseguró que su despido estaba motivado también en su problema de salud ya que, aunque posteriormente fue sometida a una intervención, la empresa, indica el fallo, mantenía que tenía una incapacidad de carácter permanente. El juez estimó la demanda de la trabajadora, declarando la nulidad del despido, condenando a la empresa a readmitirla y al abono de los salarios que dejó de percibir entre la fecha del despido y su readmisión.
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