La Asociación Profesional de Vigilantes de Seguridad Privada de Asturias (AVISPA) defiende las actuaciones ejercidas por los vigilantes de seguridad en las labores de registro del derbi de El Molinón y niega la desproporcionalidad denunciada por el Real Oviedo, afirmando que fueron "correctas y ajustadas" a la normativa reguladora de este tipo de eventos deportivos.
El colectivo explica en un comunicado que las labores de registro fueron las previstas tanto en lo relativo a las funciones de los servicios de seguridad como en lo relacionado con las normas de aplicación planificadas por LaLiga. AVISPA señala que no se aprecia desproporcionalidad por parte de la seguridad privada en ningún momento en el control de los aficionados azules al estadio en el derbi, y tampoco a la entrada, permanencia o salida del estadio, y niega el trato vejatorio denunciado por aficionadas que tuvieron que entrar en el campo desprovistas de gran parte de su ropa.
"Nadie quedó en sujetador públicamente, únicamente se ejercieron las medidas preventivas en cuanto al acceso con prendas no autorizadas, de lo que ya tenían conocimiento previo dichos desplazados, haciendo caso omiso de las indicaciones para provocar", apunta el coordinador general, Jorge Cuesta. La nota concluye aludiendo a la Ley de Seguridad Privada en la que se recogen las funciones de los vigilantes de seguridad y apunta al Real Oviedo, a su Junta Directiva y a la Asociación de Peñas del conjunto azul (APARO) como principales apoyos de unos "aficionados ultras cuya labor principal es provocar altercados".
La Asociación responde así a una denuncia del conjunto azul en la que se recogía el malestar del club con unos cacheos que consideran "excesivos" para con la afición carbayona y en la que se denunciaba que esa misma seguridad privada actuaba con otro rasero entre la afición local, dando lugar a que los oviedistas tuvieran que acceder sin prendas con logos o siglas de el Grupo Symachiarrii y que en el resto de estadio sí se vieran bufandas con lemas como "Puta Oviedo".
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