La crispación social crece cada día por la falta de personal para poder atender la alta demanda de ciudadanos que necesitan una solución a su situación.
Un usuario de la delegación de Asuntos Sociales del Ayuntamiento de Cádiz de la calle Zaragoza agredió este miércoles al vigilante de seguridad de la misma, con el que tuvo un forcejeo al intentar ser atendido sin contar con cita previa, teniendo también un enfrentammiento verbal con una conserje. Según comenta este trabajador que lleva siete años en esta delegación, Antonio, «la situación va a peor cada día porque falta personal y los trabajadores están completamente saturados».
Las medidas impuestas por la pandemia obligan a los usuarios a pedir cita por teléfono o correo electrónico, misión que la mayoría de las veces es imposible. «Entendemos la impotencia de muchos usuarios que necesitan ayuda urgente pero nosotros no tenemos la culpa y cada día recibimos un trato que podríamos llamar vejatorio. Nos insultan continuamente y ya no podemos más. Hay que dar una solución a esto», afirma. Antonio cuentan con lesiones en el cuello y en la espalda y ha recibido una baja de dos días tras la agresión de este miércoles aunque asegura que esta situación de puede repetir en cualquier momento.
Por su parte, Carmen, conserje, señala que «somos los que estamos en primera fila y los que recibimos diariamente insultos, descalificaciones y hasta amenazas. Me ha dado un ataque de ansiedad por la situación vivida hoy y no es la primera vez. Ha habido más casos y siguen sin ponerle solución». Si antes de la pandemia, la media de personas que se atendían era de un centenar, ahora se atiende a unas veinte personas al día cuando la demanda se ha duplicado como consecuencia del covid.
Desde el CSIF se reclama al Ayuntamiento el refuerzo tanto de seguridad privada como de personal administrativo y trabajadoras sociales en este servicio municipal, «para solucionar de una forma más eficaz y eficiente las deficiencias que sufren los ciudadanos en materia de asistencia». El sindicato insiste en que este personal «está al cien por cien de carga de trabajo desde hace mucho tiempo, afrontando la situación con toda profesionalidad, pero si se quiere optimizar y agilizar el servicio, es urgente ampliar los recursos humanos». CSIF muestra su repulsa por cualquier episodio violento contra trabajadores en el ejercicio de sus funciones y recuerda a la ciudadanía que existen canales para denunciar su disconformidad y nunca se debe recurrir a la violencia, ni física ni verbal.
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