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19 de agosto de 2018

TENERIFE: La "confianza total en el equipo" del vigilante más antiguo de la Residencia

"Este centro tiene una excelente plantilla. Ahora se ha visto pero yo lo llevo viendo desde hace muchos años" afirmó el coordinador de Seguridad de la Candelaria

Tiburcio Martín, conejero de 58 años, estaba en un Centro Comercial de Santa María del Mar con su familia pasando el día libre cuando lo llamaron de urgencia. Con los mismos pantalones cortos que llevaba apareció en el centro de control de seguridad de la conocida popularmente como Residencia de la Candelaria. Este profesional de la empresa concesionaria del servicio de seguridad de todo el recinto -Ilunion- es el coordinador general y, además, el vigilante más antiguo del Hospital. Por eso está siempre disponible.

Se encontró en medio de todo el revuelo con René Batista y puede corroborar que su compañero de seguridad fue el primero en enfrentarse a las llamas en solitario poco después de saltar la alarma. "Es él y son todos. Este centro hospitalario tiene un excelente equipo. Ahora se ha visto pero yo lo llevo viendo desde hace muchos años, todos los que he estado aquí, desde 1986. Y ya ha llovido... Tengo una confianza total en todos los profesionales, desde el área de mantenimiento al de enfermería, pasando por los celadores, médicos y demás plantilla", resalta.

Máxima colaboración Revela que la extinción del incendio no se demoró más de 40 minutos y que el grueso de la evacuación se hizo en mucho menos. En su parcela, la labor se basó en la colaboración con los bomberos, la Policía Nacional y la Policía Local, si bien también echó una mano en todo lo que se le presentó. "Por ejemplo, bajé a unos vestuarios que hay en la planta - 2 para ver si había quedado alguien del personal allí. No había nadie". También colaboró en la ordenación de las numerosas ambulancias que acudieron a la Candelaria del Servicio de Urgencias Canario, Protección Civil, Cruz Roja y otros centros sanitarios. "Las ambulancias ocupaban una zona amplia de la carretera de El Rosario. Era impresionante ver la hilera", recuerda. Tiburcio Martín fue uno de los muchos que apenas pudieron dormir. Llegó a casa a las 3:30 de la madrugada y se reincorporó al Hospital a las 5:30. Es la hora a la que entra a trabajar todos los días.

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