Denuncia que no les dejan llevar chalecos antitrauma porque generan "alarma social"
El vigilante de Son Espases que fue agredido la semana pasada en el centro hospitalario por un hombre que iba semidesnudo reclama más medidas de seguridad y denuncia la actitud del responsable de turno de Eulen.
Según ha indicado el trabajador a Crónica Balear, al solicitar apoyo debido a la actitud del individuo, el responsable de su empresa, que se encontraba en una sala a unos 200 metros del lugar del suceso, “viene caminando, muy relajado, y tarda unos 8 minutos en llegar cuando todo ya había pasado”.
“Es indignante que pida ayuda y el responsable, que tendría que venir corriendo, no lo haga. Parece que no iba con él la cosa”, lamenta el vigilante, quien asegura que ya ha presentado un escrito ante la empresa informando de la actitud de este trabajador y avisa que, si la dirección no hace nada, éste tomará medidas legales contra él. Añade que los vigilantes de Eulen de Son Espases están “hartos” de este hombre, ya que, al parecer, no es la primera vez que ocurre una situación como esta.
RECLAMAN CHALECOS ANTITRAUMA El empleado asegura que llevan tiempo reclamando a la empresa que les dejen llevar chalecos antitrauma para evitar golpes contundentes, pero desde la dirección se niegan porque generan “alarma social”. Al parecer, únicamente lo pueden utilizar los vigilantes de urgencias. Sin embargo, critica que cuando ocurre un incidente de este tipo en urgencias, todos los vigilantes del hospital, quienes están repartidos por diferentes áreas del centro, se acercan para auxiliar al compañero que está siendo agredido, por lo que dice que el peligro es igual para todos. El trabajador cree que ahora no estaría de baja médica si hubiese llevado puesto el chaleco.
INDIGENTES DURMIENDO EN SON ESPASES Por otro lado, el hombre declara que el agresor, que no fue detenido, no era un paciente, sino un indigente que llevaba varios días durmiendo en el hospital. “Hay muchos indigentes que duermen en Son Espases. Casi todas las noches tenemos problemas con ellos porque se pelean para dormir al lado de los enchufes y cargar así sus móviles”, concluye el vigilante que espera que la dirección del hospital tome también medidas para evitar esta mala imagen del centro.
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