El riesgo de creer en la Seguridad
Ejemplo. Rafael Tinoco, que tras veinte años en el Ejército del Aire fundó una empresa pionera en la Seguridad Privada, recibe en su undécima edición el premio Rafael Padura
Cuestión de tocayos. Rafael Tinoco (Sevilla, 1942) recibió ayer en su undécima edición el premio Rafael Padura Rodríguez que la Confederación de Empresarios de Sevilla (CES) concede cada año para preservar la memoria de quien el 5 de septiembre de 1984 fue asesinado por terroristas del Grapo cuando llevaba seis meses al frente de dicha institución patronal.
El empresario premiado comparte los valores de quien da nombre al galardón. Los méritos de Rafael Padura (1947-1984), los volvió a recordar Miguel Rus, presidente de la CES. "Fue el hombre que había conseguido aglutinar las distintas tendencias que, en aquel momento, existían en la CES. Fue capaz de romper las diferencias, aunar criterios y unir sensibilidades". La viuda de Padura, María Luisa de Castro Oliveira y Silva, sus hijos Rafael y Sara y su nieta Carla, en representación de los cuatro nietos del empresario asesinado, acudieron al restaurante Muelle 21 del Acuario de Sevilla en nombre de la memoria de Padura y para arropar al empresario galardonado con el premio. Al acto acudieron premiados de anteriores ediciones como Francisco León, Juan Robles o Pedro Sánchez Cuerda. "Arriesgar, innovar y posicionarse en el mercado". Son los méritos que acreditan en palabras de Miguel Rus la trayectoria profesional de Rafael Tinoco. 57 años de vida laboral y empresarial que se pueden seccionar en décadas. En 1960, con 18 años, aprueba las oposiciones para técnico del Servicio de Transmisiones del Ejército del Aire en la Región Aérea del Estrecho, con sede en la Base Aérea de Morón, junto un año después de la visita a España de Ike Eisenhower.
En 1970 ocurren dos hechos fundamentales en su vida: funda Electrónicas Tinoco y se casa con Esperanza Campos. "La conocí cuando estaba a punto de irme con los americanos, porque el modelo de avión Standard se lo habían llevado de Morón a Alemania y querían que me fuera con ellos". El amor pudo más que todo eso. Fue la mujer que le dio sus seis hijos. Se emocionó al recordar la reciente pérdida del mayor, Rafael Ángel, segunda generación de la empresa, tercera en realidad porque el padre del empresario también trabajó con él. Al acto acudieron sus hijos Esperanza, Francisco José, María e Inmaculada. Faltó Gema, madre de gemelos, dos de los diez nietos del empresario galardonado. En 1980 tuvo que tomar una decisión fundamental, "o dejaba el Ejército o dejaba mi empresa". Dejó el Ejército dos décadas después y cimentó una próspera carrera empresarial, pionero en el sector de la seguridad privada, que todavía estaba en ciernes. "Empezamos a poner alarmas en las embajadas, porque hasta entonces sólo las tenían los bancos", diría a este periódico.
Morón. Talavera la Real. Getafe. Todos los hitos de la industria aérea española los ha conocido. Por su colaboración con las Fuerzas de Seguridad, recordó a quienes han sido "objeto de vejaciones y escraches en Cataluña". En su intervención, tuvo palabras de reconocimiento para el empresario Javier Benjumea Puigcerver, con quien colaboró en la instalación de plataformas telefónicas. "Gracias a él nuestros clientes estaban en España, Marruecos y Estados Unidos. Puso en marcha una empresa que dio muy buenos ingenieros y grandes profesionales que ahora son líderes en empresas de todo el mundo". Testigo de algunos de los hitos de la aeronáutica como el Super Saeta que salió de la trianera Hispano-Aviación, confió en que la firma Airbus mantenga la relevancia industrial que tuvo Sevilla en esa actividad. Miguel Rus destacó de Tinoco "tu visión de futuro y tu olfato para cazar las tendencias y los nuevos aires en el sector de la seguridad".
La firma Tinoco se especializó en la instalación y mantenimiento de sistemas electrónicos de seguridad y en protección contraincendios. Representa el espíritu de Padura, empresario asesinado con 37 años. "Los tiempos han cambiado desde entonces", dijo Miguel Rus en el cuadragésimo aniversario de la CES, "y las organizaciones empresariales tenemos que reinventarnos cada día". Lo que hace Rafael Tinoco.
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