El procesado hurtó una espada, una daga, un guante y una llave, valoradas en 2.000 euros, que exhibía un área comercial
Aparcó el coche en la puerta de un centro comercial en diciembre de 2014, se dirigió a la exposición sobre ´El señor de los anillos´y, tras manipular las vitrinas, sustrajo objetos valorados en 2.000 euros. Las cámaras de seguridad lo grabaron, pero consiguió huir. El hombre, de 40 años, regresó al día siguiente a la muestra. Llegó al recinto en el mismo coche y vestido igual. En cuanto accedió a las instalaciones fue identificado por un vigilante de seguridad
Un hombre de 40 años fue condenado por robar una espada, una daga, un guante y una llave de la exposición sobre El señor de los anillos que organizó en diciembre de 2014 un centro comercial de la ciudad. El imputado, que carece de antecedentes penales, fue sentenciado por cometer un delito de hurto a seis meses de cárcel, pero no ingresará en prisión porque la pena es inferior a dos años. El material que sustrajo fue tasado pericialmente en 2.000 euros, por lo que el juez también le impone en la sentencia el pago de ese importe al propietario de los objetos.
El sospechoso fue detenido porque regresó al centro comercial al día siguiente de apoderarse de los efectos, que estaban en el interior de vitrinas. En concreto, sustrajo una espada Sting Museum Collection, una daga del Rey Brujo, un guante de Sauron y una llave de Erebor. El vigilante encargado de las cámaras de seguridad declaró durante el juicio que observó al acusado manipular las urnas de la exposición de El señor de los anillos y coger algunos objetos, por lo que alertó a la policía y al centro comercial. Unos clientes también avisaron a un vigilante de seguridad, pero cuando llegó el sospechoso ya se había dado a la fuga en un coche.
Al día siguiente, el 8 de diciembre sobre las 22.00 horas, volvió a las instalaciones, pero fue identificado por un trabajador que había visionado las grabaciones del hurto. Ese día, el sospechoso dejó el turismo aparcado en la acera, delante de la puerta del centro comercial, e iba vestido con la misma ropa que el día anterior. El automóvil también era el que figuraba en las cintas de las cámaras de seguridad. Los vigilantes alertaron a la policía y lo retuvieron en el recinto hasta que llegaron los agentes, quienes procedieron a su detención.
El condenado, que reside en la Comunidad de Madrid, no se presentó al juicio, pero la vista se celebró igualmente. El representante del Ministerio público solicitaba que fuese penado con un año de prisión. Su abogada alegó que el delito había sido cometido "en grado de tentativa", un argumento que no se sostiene porque, tal y como indica el juez en la sentencia, huyó del centro comercial con la espada, la daga, el guante y la llave; no fue detenido hasta el día siguiente; y el botín no fue recuperado. El procesado puede recurrir la sentencia ante la Audiencia Provincial de A Coruña.
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