La Policía Nacional, con apoyo del servicio de seguridad del centro, arrestó al delincuente cuando ya se hallaba en Finca La Multa.
Los hechos fueron detectados durante la tarde del pasado domingo 25 de junio entre las 19:30 y las 20:00 horas. Miembros de la Policía Nacional detuvieron, con el apoyo de personal de seguridad del centro, a un individuo que cometió diferentes hurtos a pacientes del Hospital Universitario de Canarias (HUC). Los robos al descuido fueron cometidos en diferentes plantas del edificio y, generalmente, el delincuente sustraía teléfonos móviles o carteras con dinero en efectivo.
La alerta de que un ladrón estaba actuando en dicho centro hospitalario de referencia se produjo cuando una mujer de avanzada edad comentó que un hombre joven había entrado en su habitación, se sentó a hablar con ella durante unos minutos y, a continuación, le sustrajo su teléfono móvil. Testigos y personal sanitario del complejo pusieron el asunto en conocimiento del equipo de seguridad del HUC, que, de forma inmediata, alertó a los policías nacionales que esa tarde custodiaban detenidos en dicho recinto. Supuestamente, los robos al descuido ocurrieron en las plantas 7, 8 y 9 de dicha infraestructura.
Los testigos aportaron datos sobre la vestimenta que llevaba el presunto autor de los hurtos y los agentes de la Policía Nacional de la Comisaría de La Laguna comenzaron a buscarlo. En un determinado momento, los funcionarios recibieron una comunicación relevante de los vigilantes, donde se explicaba que el delincuente había salido por una puerta trasera exclusiva para el personal por la parte trasera del hospital, frente al conocido popularmente como Hospital del Tórax. Los agentes salieron corriendo tras el citado individuo y consiguieron interceptarlo a la altura del barrio Finca La Multa.
En ese momento portaba un móvil del que no sabía poner el número PIN. Y, tras las pesquisas iniciales, se comprobó que se trataba de uno de los terminales sustraídos en el centro sanitario. Con posterioridad, los policías pudieron atribuirle más robos al descuido, como el de una riñonera, que apareció abandonada junto a los ascensores y con apenas 15 euros dentro. Además, a dicho joven se le atribuye un delito de apropiación indebida, pues, tras vender un coche a un conocido y percibir el dinero (aunque sin formalizar en un contrato), fue a casa de este y le quitó el automóvil y otros efectos. El arrestado fue puesto a disposición del Juzgado de Instrucción que estaba en funciones de guardia en La Laguna.
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