Los trabajadores, dispuestos a incrementar las medidas de presión. El gobierno pide a Fomento una solución urgente
El aeropuerto de Barcelona era ayer un "caos". Así lo reconoció un portavoz de la compañía Aena tras detallar cuál era la situación en los accesos al control de seguridad de la terminal I. "Se han llegado a puntas de 64 minutos de espera, a las 11 de la mañana, y se ha tenido que ampliar la zona del serpentín para ordenar la cola y minimizar el caos ".
A pesar de reconocer abiertamente el problema, desde el ente de gestión aeroportuaria del Estado se continuaba ayer con la decisión de no participar en ninguna de las conversaciones que buscan una salida a la crisis generada por la protesta del personal de la empresa Eulen que atiende los controles de seguridad.
La presencia de Aena en la mesa de negociación es la condición que pusieron los trabajadores en una reunión el pasado martes con los responsables de recursos humanos de Eulen, pero desde Aena se insistía ayer: "Nunca nos hemos sentado a mediar en un conflicto que afecta otra empresa. "Sin embargo, a última hora de ayer el Departamento de Trabajo anunció que los trabajadores habían decidido asistir a una reunión con la empresa que se hará esta mañana.
Además de esta reunión con la empresa, el comité de huelga de los trabajadores se reunirá por la tarde con la idea de valorar la posibilidad de endurecer los términos con que han planteado la parada que debe comenzar el día 4 de agosto y que, en un principio, afecta los viernes, domingos y lunes, en unas franjas horarias concretas. La propuesta que salga de la reunión de hoy se deberá llevar a votación la próxima semana en asamblea. La protesta de los trabajadores se está llevando al margen del comité de empresa de Eulen, que ayer se reunieron con la dirección en un encuentro en la que no se habló del conflicto del aeropuerto barcelonés.
Todos los viajeros que se consideren afectados por la protesta del personal de seguridad pueden presentar una reclamación rellenando una hoja que tienen a su disposición en el mostrador de información de Aena, que será la encargada de dar curso a la queja formal. La crisis del Prat generó ayer la intervención del consejero Santi Vila, que pidió a Aena una "solución urgente". También el consejero Josep Rull pidió explicaciones al ministro de Fomento. En Madrid el PSC también pidió explicaciones.
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