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La renuncia a la subasta por parte de la empresa pública reduce la baja media a un 1,34%. Las dos grandes ganadoras se reparten un 63% de los 339 millones adjudicados
Ilunion ganará contratos por 109 millones; Trablisa se llevará lotes por 104,9 millones; Segurisa sumará servicios por 48,6 millones; Eulen se adjudica trabajo por 37,9 millones, e ICTS se impone en dos lotes por 34,2 millones.
El mayor concurso de seguridad privada que se convoca en España está visto para sentencia. La mesa de contratación de Aena abrió ayer los sobres con las ofertas económicas por los servicios de vigilancia, durante los dos próximos años, en los aeropuertos con más de 400.000 pasajeros al año. Y los grupos Ilunion y Trablisa van a convertirse en las mayores adjudicatarias. A la vista del resultado provisional, que debe ser ratificado la próxima semana por el consejo de administración del operador público, Prosegur se queda fuera de la red de aeropuertos después de ser el mayor proveedor de este tipo de servicios para Aena, con presencia en 17 de las grandes plazas.
Ilunion, que reaparecerá como proveedor de Aena, ha sido propuesto como adjudicataria para el control de pasajeros en Madrid-Barajas, que es el mayor de los lotes en juego con un presupuesto de 58,33 millones. Por esta adjudicación competía con Trablisa y se ha impuesto con una oferta de 58,22 millones, lo que supone una baja de solo el 0,2%. El otro gran bocado era el de la vigilancia en los arcos para pasajeros de Barcelona-El Prat, ganado por la mallorquina Trablisa, en un mano a mano con Ilunion. Su oferta ha sido de 41,22 millones sobre un presupuesto de licitación de 41,43 millones, lo que sitúa la baja en un escueto 0,5%. Esta última compañía, procedente del segmento de negocio de los blindados, ha acumulado experiencia en los últimos años con la vigilancia en el aeropuerto de Palma de Mallorca, contrato que van a renovar. Ilunion ganará contratos por 109 millones; Trablisa se llevará lotes por 104,9 millones; Segurisa, por 48,6 millones; Eulen se adjudica trabajo por 37,9 millones, e ICTS se impone en dos lotes por 34,2 millones
En este esperado proceso Aena elevó las exigencias técnicas y ha evitado la subasta electrónica, con lo que la baja media sobre los 339,21 millones licitados (excluido el lote de 20 millones de Canarias Oeste, que queda desierto) ha sido de un insignificante 1,34%. A ello también ha contribuido que dos de los grandes de la seguridad privada, Prosegur y Eulen, apenas han concurrido al considerar que los presupuestos estaban demasiado ajustados; Securitas decidió no concursar, y en el corte técnico quedaron eliminadas Ombuds, Abydos y Grupo Sureste. Con todo, la empresa que preside Jaime García Legaz ha contado con seis firmas de seguridad como finalistas.
Los pliegos han incorporado las novedades del nuevo convenio colectivo de la seguridad privada (con un alza salarial del 2%) y los pluses acordados entre el Gobierno y el sector para los trabajadores que prestan servicio en infraestructuras públicas (subida adicional del 9%). Fruto de estas mejoras, Aena había elevado su presupuesto de licitación en casi un 33% con el objetivo principal de que no se repita el caos del pasado verano, que afectó principalmente a Barcelona-El Prat, por las huelgas de los vigilantes.
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