El sindicato aportó cerca de dos millones de euros a la inmobiliaria declarada en suspensión de pagos. El agujero económico para esta organización se mueve en el entorno de los dos millones de euros
La UGT de Balears se encuentra al borde del colapso financiero, según reconocen fuentes del propio sindicato, después de que su promotora inmobiliaria se haya tenido que declarar en concurso de acreedores. El agujero económico para esta organización se mueve en el entorno de los dos millones de euros, y no se oculta que el sindicato de las islas no está en disposición de hacer frente a esta deuda.
El golpe tiene su origen en el fracasado proyecto de edificar 60 viviendas de proyección oficial, que se quedaron sin compradores tras un cambio en la normativa sobre subvenciones a los adquirentes. El edificio, situado entre las calles Jeroni Pou, Pere Guillem Vives y Antoni Ribas, de Palma, sigue sin terminar de construirse (se estima que queda pendiente alrededor de un 3% de las obras y la instalación de un transformador de Endesa). Esta iniciativa fue desarrollada por la promotora de la propia UGT, Habitatges i Serveis de ses Illes Balears, y contó con financiación directa del sindicato de las islas y de la confederación estatal, en una cantidad conjunta que se calcula inicialmente en torno de los dos millones de euros. Además, hay que tener en cuenta que la promotora también tiene unos impagados a empresas proveedoras por un valor de alrededor de medio millón de euros.
Al bloquearse la venta de estos inmuebles y no poder concluir las obras, la inmobiliaria optó por presentar a finales de 2013 un preconcurso de acreedores, ante el temor a que las empresas a las que se les debía dinero se adelantaran a la hora de instarlo. El administrador de Habitatges i Serveis de ses Illes Balears y exsecretario de Organización de UGT en las islas, Miguel Angel Carlos, aseguró que a principios de este año el problema quedaría resuelto, alegando que se estaba negociando con otras empresas promotoras el que éstas adquirieran estos pisos. Pero una vez concluido el plazo, esta operación no se ha realizado, lo que ha llevado a la presentación de la suspensión de pagos, que dejará a la citada empresa de UGT en manos de administradores fijados por un juez. Además, hay que tener en cuenta que hay otra promoción menor en la calle Primavera también con pisos pendientes de encontrar comprador.
Fuentes del sindicato consideran que la deuda con las empresas suministradoras podrá ser saldada, dado que la promotora cuenta con patrimonio y no hay trabajadores en la obra. Además, la promoción contó con la correspondiente hipoteca, que se cubrirá dejando los pisos en manos de la banca. Pero se da como seguro que en este concurso de acreedores quien no podrá recuperar su dinero será la propia UGT, cuya situación financiera ya era delicada por la pérdida de ingresos y la reclamación por parte del Govern de que justifique un gasto de alrededor de un millón de euros en cursos de formación.
Como se ha indicado, fuentes del sindicato admiten que entre lo aportado por la confederación estatal y por UGT de las islas, el agujero a cubrir se movería cerca de losdos millones de euros, una cantidad que se reconoce como prácticamente imposible de asumir en el caso que desde Madrid los mandos nacionales del sindicato exijan a susrepresentanes en el archipiélago la devolución de la parte que financiaron.
Fuente: FUENTE: diariodemallorca.es AQUÍ
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