Acaban de despedirles desde una empresa sin proyecto
Los vigilantes de la Fábrica de armas están haciendo el Camino de Santiago a pie desde las diez de la mañana. Pretenden denunciar la falta de seguridad en las instalaciones, con maquinaria importante para la fabricación de armamento y la pasividad de las administraciones ante su despido y la falta de espectativas del proyecto. Piden que se recupere la concesión y se convoque un nuevo concurso por los continuos incumplimientos, denuncian, de Hércules de Armamento.
El pasado 12 de junio los nueve vigilantes de seguridad de la fábrica coruñesa recibieron el papel de baja de la Seguridad Social tras pasar sin cobrar abril y mayo. La mayoría llevan 30 años en su puesto. Denuncian que la factoría no tiene producción y no hay rastro de los 155 empleos indefinidos comprometidos. Todas las empresas adjudicatarias del servicio de seguridad de las instalaciones desde 2009 han denunciado ante los tribunales los continuos impagos de la entidad.
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