El doble juego de las centrales sindicales con la reforma laboral vive esta semana otro caso clamoroso en Galicia. Días después de que convocase a miles de personas en las calles de Madrid para cargar contra las medidas del Gobierno, CC OO no ha dudado en tirar de ella para pagar el mínimo posible a los 24 trabajadores de Forem –su Fundación para la Formación y el Empleo– incluidos en un ERE. Son dos terceras partes de la plantilla fija de la fundación, integrada por 38 personas (35 empleados y tres miembros «intocables» de la directiva), pero afectará en total a 61 personas, porque incluye a profesores y colaboradores eventuales, según consta en el expediente oficial presentado por el sindicato. CC OO exprime la reforma laboral y ofrece indemnizaciones mínimas de 20 días por año trabajado hasta un máximo de 12 meses. También ha anunciado que cerrará tres de sus 24 centros.
A esta propuesta, «inaceptable» según María Díaz, representante legal de los trabajadores, se une otro agravante, porque no es que Forem en Galicia presente números rojos, ni arrastre deudas de años anteriores. Todo lo contrario. Obtuvo 50.000 euros de beneficios en el pasado ejercicio regular, los cuales ascencieron a más de 600.000 gracias a ingresos extra llegados, entre otras cosas, de la venta de software, según reconoce el representante del sindicato que negocia con la plantilla, Xabier Dongil. Y aún así, Comisiones aduce «previsión de pérdidas» para justificar los despidos, una de los «arietes» utilizados por las centrales y los partidos de izquierda para criticar la reforma de Fátima Báñez.
Xabier Dongil se justifica: «Los recursos para formación han caído un 66%, y todavía no se ha negociado más cursos. Es muy arriesgado seguir con la misma plantilla, porque si antes trabajábamos con un presupuesto de siete millones por año, éste esperamos contar sólo con tres millones». El problema, según la plantilla, es que el sindicato se niega a negociar . «Nos reciben, nos reunimos, pero no ceden en nada», comenta María Díaz. La plantilla ha pedido que, dados los buenos resultados económicos obtenidos hasta ahora, se intente conservar los puestos de trabajo, «o que se mantengan aunque sea a media jornada –añade Díaz–. Y si la situación es insostenible, por lo menos que las indemnizaciones sean decentes y, por favor, que no argumenten previsión de pérdidas cuando en marzo ha hecho una huelga general contra la reforma laboral».
Pero CC OO no cede. Sólo se plantea que «cinco o seis trabajadores» compartan la jornada. «Un trabajador a jornada completa no cuesta lo mismo que dos a media jornada, y además, todos los puestos se pueden desdoblar», asegura Dongil. «Ni negociación ni reorientación en busca de salidas», responden los trabajadores. Y su pregunta es obvia: ¿por qué el sindicato-patrono paga los despidos más baratos si nunca ha habido pérdidas? El sindicato responde que no tiene recursos propios para pagar más. «Tenemos que garantizar la continuidad de Forem, y la ley de fundaciones de Galicia nos pone muchas condiciones», zanja Dongil. Ante la postura de la empresa, los trabajadores harán huelga indefinida a partir del día 24.
En Sevilla pretenden despedir, en pricipio 11 trabajadores y reducir jornadas.
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