El Sindicato Profesional de Vigilantes llama la atención de la ciudadanía sobre la precaria situación de los 12 pozos de gas existentes en Sevilla y su provincia, en cuanto a la seguridad de sus instalaciones. En ellas se manipula, se trasvasa y se almacena este fluido, y todo ello en alguno de los casos a solo 100 metros de núcleos residenciales. La empresa ‘Unión FENOSA-Gas natural’, unilateralmente ha decidido (contraviniendo la legislación vigente al efecto) prescindir de la vigilancia física en sus instalaciones con pozos de gas, en la que en la mayoría de ella no existen ni sistema de cámaras de seguridad.
SPV considera que no se puede dejar la seguridad de todas las personas que conviven en las cercanías de estas instalaciones al albur de un sistema absolutamente vulnerable. La multitud de accidentes acaecidos en instalaciones de ese mismo tipo, a nivel internacional, corroboran la necesidad de que estén convenientemente vigiladas con los máximos medios posibles, incluyendo servicio de seguridad 24 horas con arma, cámara y sistemas de alarma. Así lo ha corroborado la Subdelegación del Gobierno en sus resoluciones, en las que reclamaba vigilantes de seguridad armados para dichas instalaciones, aunque hasta la fecha no las ha hecho cumplir.
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