SPV quiere llamar la atención de los trabajadores de la seguridad privada y, a la vez poner en conocimiento de los clientes que requieren de este tipo de servicios, del riesgo que supone para el vigilante de seguridad que su empresa se descuelgue del Convenio Colectivo. Estas empresas de seguridad, de baja categoría, intentan ganar competitividad a costa de sus trabajadores precarizando hasta el límite sus condiciones laborales, sociales y de seguridad en el trabajo.
Compañeros: nadie está libre de caer en las garras de una empresa de este tipo, pues en cualquier momento os podéis ver envueltos en una subrogación y tener la mala suerte de coger el servicio una empresa que ha solicitado "descolgarse del convenio". Este tipo de empresas son una auténtica amenaza para cualquier vigilante en activo.
Es por ello que SPV seguirá señalando "con negrita" a las empresas de seguridad que tomen el camino fácil de descolgarse del convenio. Asimismo, nos reservamos tomar todas las medidas que estimemos oportunas (movilizaciones, artículos, comunicaciones y concentraciones en las instalaciones de los clientes que las contranten...) para destapar y dar a conocer a este tipo de empresas, auténtica lacra y veneno para el porvenir de todos los trabajadores que nos dedicamos a la seguridad privada.
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