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El sindicato USO ha denunciado este martes que los vigilantes de seguridad del aeropuerto de Palma trabajan a temperaturas que alcanzan los 30 grados, algo que pone en riesgo su salud.
Según el sindicato, el organismo gestor Aena vulnera la normativa al someter a los trabajadores a "temperaturas prohibidas en edificios públicos" y obvia los requerimientos al respecto por parte de la Inspección de Trabajo, realizados a petición del comité de empresa. El sindicato asegura en un comunicado que los vigilantes de seguridad del Aeropuerto de Palma deben realizar sus funciones con temperaturas cercanas a los 30 grados e incluso más altas cuando las instalaciones se saturan. USO ha alertado del riesgo que conlleva, cuando además los vigilantes de seguridad deben trabajar con guantes y mascarillas por la crisis sanitaria, lo que agrava su situación.
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