Se trata de un proyecto subvencionado por la Consejería de Empleo de la Junta de Andalucía, dentro de los programas de formación para el empleo (PFE). El CAFA, donde se ubicará las nuevas instalaciones de tiro, es un centro de formación, hasta ahora gestionado por un patronato, en el que están representados el Ayuntamiento de la localidad, la Diputación de Sevilla y FICA (Federación de Industria y Agroalimentario).
La idea surge por la necesidad de dotar a estas instalaciones de un lugar para la práctica de tiro encaminada a potenciar especialidades e innovar en otros sectores de empleos que estén desatendidos de recursos, y que tienen o pueden tener una biena proyección de futuro. Tales como los cursos de vigilantes de seguridad y vigilante de coto que están previsto se lleven a cabo en el centro. Además en las instalaciones se podrán hacer las prácticas de tiro obligatorias para los agentes de la policía local y guardia civil de la comarca.
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