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Fueron ellos dos, explican los representantes del CSOI, quienes pasaron por allí justo después del accidente y se pararon al ver el coche destrozado. Se llaman Francisco Gallego Pérez y Borja Vázquez Saco y «después de comprobar que la víctima se encontraba atrapada en el vehículo, uno de ellos llamó al 112 para comunicar el siniestro, su ubicación y la situación que apreciaban, y el otro señalizaba el lugar y avisaba al resto de los conductores.
Lo dos vigilantes esperaron a los servicios de emergencia «acompañando y asistiendo a la víctima». Mientras ellos estaban allí fueron llegando, por este orden, una ambulancia del 061, los bomberos, la Policía Local y la Guardia Civil de tráfico. Ellos se marcharon cuando los agentes de tráfico se hicieron cargo de la situación. Este sindicato agradece la actuación de todos los servicios de emergencia, pero reivindica «a los ciudadanos particulares que se encuentran con situaciones de tanta gravedad y reaccionan con la frialdad y diligencia necsaria para que rescates como este se lleven a cabo con éxito».
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